«El aprendizaje significativo implica una revolución total en la forma de entender el mundo y sobre todo los procesos de enseñanza y aprendizaje. Es fundamental que pensemos que los roles tradicionales de enseñar y aprender, de la enseñanza y del aprendizaje han cambiado dramáticamente, espectacularmente en el siglo XXI en la llamada Sociedad del Conocimiento y de la Información.

Hoy en día se entiende por aprender el construir conocimiento por parte del alumno que asume esta responsabilidad y se entiende por enseñar el crear por parte del docente las condiciones que permitan que el proceso de construcción del aprendizaje y del conocimiento lo realice el alumno. Conocido esto, la respuesta más directa la proporciona el aprendizaje significativo frente al aprendizaje memorístico dominante. El aprendizaje significativo se caracteriza porque el alumno se involucra en la tarea de aprender y añadir nueva información a información previa que tiene, esto tiene unos requisitos y unos desafíos para la labor pedagógica del profesor, en primer lugar conocer lo que el alumno sabe, en segundo lugar adaptar los materiales curriculares e instruccionales a esta mente jerarquizada que el alumno posee en la memoria a largo plazo y en tercer lugar fomentar una actitud favorable al aprendizaje.

El aprendizaje significativo conlleva una ilusión para que el alumno se envuelva, se involucre en la aventura de aprender del disfrute de crear conocimiento, de pasar la mera información a conocimiento útil. Conocidos los requerimientos del aprendizaje significativo ahora nos planteamos como ponerlo a la práctica, entonces la respuesta viene dada por ningún otro elemento por los llamados mapas conceptuales.

Los mapas conceptuales son una forma de organizar el conocimiento, de hacerlo visible y se resuelve en conceptos y palabras de enlace, de tal manera que ahora podemos decir que el conocimiento podemos representarlo a través de conceptos y palabras de enlace que expresan el significado que para mí tienen la relación entre los conceptos. Esta forma de organización jerarquizada es lo que se llama un mapa conceptual.

El mapa conceptual es extraordinariamente eficaz porque nos va a permitir conocer lo que el alumno sabe, introduciéndonos en la técnica y como técnica proyectiva que es licitando, sacando al exterior el conocimiento que el alumno tiene y por tanto hacerlo visible, por otra parte el mapa conceptual nos va a permitir organizar el currículum de instrucción de manera conceptualmente transparente, de tal manera que el alumno pueda incorporar en este proceso de anexión, de relación de nueva información con la previa. La experiencia nuestra demuestra que la tercera condición, el fomento de una actitud favorable se realiza sin ningún problema cuando el alumno llega a dominar esta práctica.

El aprendizaje significativo lo conseguimos a través de mapas conceptuales que nos permiten a su vez hacer operativos los principios teóricos de la teoría de la Ausubel, Novak y Gowin. Han surgido en esta teoría y no conozco teoría anterior que ofrezca un cuerpo de conocimientos, de principios que sustentan la teoría de aprendizaje y que en su seno haya surgido un instrumento como los mapas conceptuales que permiten hacerla operativa, con otra particularidad también que hay un programa CmapTools que nos permite utilizar todos los recursos de la red en la realización de los mapas. CmapTools permite potenciar el poder creativo de los mapas y de fácil utilización y de acceso libre y gratuito realizado por el Institute for Human and Machine Cognition (IHMC) de manera que los procesos de enseñanza aprendizaje se van a relanzar con el dominio de esta técnica muy sencilla».

Fermín M. González. Catedrático de Ciencias Experimentales de la Universidad Pública de Navarra.